Apadrina la ilusión de un niño

En estas fechas tan señaladas, nuestro Proyecto ha querido realizar un apadrinamiento de 4 cartas a sus Majestades los Reyes Magos. 

Una de las integrantes del grupo se puso en contacto con la Hermandad de la sed que, en el momento, estaba recogiendo cartas de niños sin recursos. Nosotros con mucha ilusión recibimos en nuestra sede al diputado de caridad de la hermandad, que fue el que nos hizo llegar las cartas de los pequeños.

En el mismo instante el Proyecto se puso manos a la obra. Se difundió un mensaje privado a los componentes de la Agrupación por si querían aportar su granito de arena para apadrinar la ilusión con una buena respuesta, una vez más, de los miembros de nuestra familia. 

En los días siguientes se realizaba la cena de navidad de la Agrupación y nos pusimos manos a la obra: chucherías, palomitas y churros con chocolate para recaudar beneficios que iban a ser destinados a esta nueva meta. 

El pasado 27 De diciembre el Proyecto hizo entrega de todos los regalos para que la Ilusión continúe toda la vida. 

Llegamos a la casa de hermandad, donde el diputado de caridad nos esperaba con los brazos abiertos junto al Teniente Hermano Mayor y a una parte del grupo joven. El trato fue exquisito y no faltaron palabras de agradecimiento a lo que simplemente fue un granito de arena. 

Entramos en la casa de hermandad, nos hicimos la foto con los detalles y a continuación, nos comentan que ellos no podían quedarse de manos cruzadas con lo que habíamos hecho por esos pequeños. Así que tuvieron un detalle con nosotros, que fue un recuerdo del Santísimo Cristo de la Sed y de Santa Maria de Consolación. 

Para el Proyecto Social de nuestra Agrupación ha sido un proyecto muy emotivo y muy bonito ya que hemos dado ilusión a estos pequeños. Es una sensación muy bonita para nosotros. Esperamos poder seguir colaborando en muchos proyectos más como estos. Sobre todo si está en nuestras manos un poquito de ilusión,porque en Santa Cecilia, contra viento y marea...La Ilusión Continúa.

Ayuda a Valencia

Retomamos nuestro blog en el que os haremos llegar toda la actividad que, día a día, hace nuestro proyecto.

No hemos dejado de trabajar por los demás pero queremos haceros llegar nuestras experiencias.

Tras varios días de noticias sobre la Dana en toda España, empezamos a recibir noticias en la TV , en las redes, en la que decían que la Dana había dejado un mal pasaje en Valencia. Personas desaparecidas, casas inundadas, personas que se han quedado sin sus casas, han perdido todo por lo que lucharon al largo de sus vidas. 

Nada más salían personas hablando de que necesitaban ayuda , que no tenían ni para darles un cachito de pan a sus hijos, a sus padres, a sus abuelos, no tenían nada. De un día para otro toda España empezó a ayudar a los vecinos de Valencia yendo a limpiar, a darles de comer, a ofrecerles todo lo que necesitarán. 

Nosotros no podíamos ir pero no queríamos quedarnos quietos tras la devastadora inundación de Valencia, así  que quisimos poner nuestro granito de arena y tuvimos la gran idea de recoger alimentos y cosas de primeras necesidades para enviarlas a Valencia. Todo el mundo se volcó con nuestra recogida , cada día venían muchísimas personas a traer lo que podían para aportar su granito de arena. La respuesta del barrio fue tal, que nuestra querida hermandad de los Dolores del Cerro tuvo que dirigir el resto de recogida a nuestra sede ya que ellos también estaban hasta arriba de ayuda. 

La recogida fue genial, se nos ocurrió hasta un ensayo solidario por las calles del barrio en la que recogimos cosas de primeras necesidades para Valencia y la gente se volcó con nosotros. Sólo nos faltaba una última cosa y era poder hacer llegar todo a Valencia, así que nos pusimos a buscar y encontramos a unos chicos que iban para Valencia y que por casualidades ya habían estado avisados por la hermandad de los Dolores, así que una de nuestras colaboradoras se puso en contacto con ellos y vinieron en el momento que les hablamos, llenando su furgoneta ¡tres veces! hasta arriba de cosas, con todas las personas de nuestra formación haciendo cadenas con alegría

 porque sabíamos que nuestro granito de arena por fin podía ir a los más necesitados por la Dana.

Teníamos conocimiento de que no querían ropa en Valencia, por lo que, todo lo que habíamos recogido de ropa hasta el momento, se lo entregamos al mercadillo solidario, para que la ayuda del Cerro recayera en el mismo barrio.

Podemos decir que jamás habíamos visto a tanta gente volcarse para ayudar a una ciudad entera, fue increíble. A pesar de que ya apenas salen noticias sobre nuestros vecinos de Valencia, seguiremos a disposición de ellos por si alguna vez les hace falta más ayuda.

¡GRACIAS, UNA VEZ MÁS, POR VUESTRA RESPUESTA!